Las
nubes se originan por el
vapor de agua procedente de la tierra
y los mares, una vez en la atmósfera dicho vapor
y por la diferencia de temperatura,
se condensa y vuelve caer a la tierra
en forma de agua, nieve, granizo o escarcha, si el terreno donde
cae es impermeable, con pendiente y falto de vegetación, rápidamente
se formen los arroyos y
estos a su vez los ríos
que, a veces inundan los pueblos y arrastran todo lo encuentran a
su paso, hasta su llegada al mar. Por
el contrario, si el terreno es permeable y además hay mucha vegetación
parte del agua, se va filtrando en la tierra, llegando a formar pequeños
acuíferos que, al atravesar diferentes
estratificaciones se
unen a otros que todos
unidos forman verdaderos ríos subterráneos. Si estos ríos proceden de
una altitud determinada, y en su recorrido
halla una capa impermeable, por la ley de los vasos comunicantes,
salen al exterior, formándose lo que se llaman fuentes o pozos
artesanos. Las
necesidades del agua van en aumento; si en la década de los años 50 se
llegaban a gastar diez litros por habitante y día, hoy en el dos mil
necesitamos por lo menos doscientos,
por lo tanto hay que buscar el
mencionado líquido, para las personas, animales, industrias
y el campo donde se encuentre,
en los ríos, pantanos, y sobre todo perforando el terreno, no
importa la profundidad, lo importante es llegar donde se encuentran, ya
que estas aguas subterráneas por
lo general son claras, cristalinas
y puras, siendo normalmente las mejores para
las personas. Para localizar estas corrientes subterráneas existen hoy en día
diferentes formas, la más usada es la
radiestesia, por este medio
lo practican las personas sensitivas, valiéndose de una simple
varilla o un péndulo; este el método más barato y sencillo para
detectar los grandes acuíferos que se hallan en el subsuelo. Hay
que tener en cuenta, que el agua subterránea
para la tierra, es semejante a la sangre para el cuerpo humano. Las principales aguas en
la provincia de Girona, son: dulces, termales y picantes |